“La única manera de ganar es aprender más rápido que nadie” Eric Ries
Entendemos que alguna vez te has sentido abrumada(o) por la cantidad de información que debes estudiar. En un mundo tan vertiginoso y con tanta información nueva saliendo cada día, la eficacia de tus métodos de estudio puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso. Por lo que probablemente te has preguntado: ¿si hay alguna manera de usar tu tiempo de estudio de manera más efectiva? Con la creciente cantidad de información disponible, es indispensable poder adaptarse; si no, será muy fácil perder la cabeza, y es fundamental poder implementar métodos que optimicen y maximicen la retención y comprensión de la información en un tiempo más corto.
Solo imagínate aprender cualquier habilidad o materia en cuestión de meses o incluso un día. El poder que puedes tener con esa habilidad es inimaginable y solo tienes que tener en cuenta que el cerebro es como un músculo que necesita ser entrenado para alcanzar su máximo potencial. Al igual que cualquier deportista se prepara con ejercicios específicos para mejorar su rendimiento, también podemos entrenar nuestro cerebro con técnicas de estudio probadas y efectivas por la ciencia. Con el enfoque correcto y las herramientas adecuadas, podemos transformar nuestro tiempo de estudio en una experiencia un poco más estimulante y gratificante.
Active recall
Seguramente ya hayas escuchado de esta técnica de estudio. Actualmente se ha popularizado y no es de extrañar. Las investigaciones científicas respaldan la repetición activa como una de las mejores técnicas que podemos aplicar para estudiar, donde obliga al cerebro a trabajar para recuperar la información de la memoria sin mirar apuntes o materiales de estudio. Tratando de recordar activamente la información de manera repetida y regular. Esto hace que la memoria se fortalezca a largo plazo, porque se obliga a repetir constantemente el material que estés estudiando.
¿Cómo utilizar el Active Recall?
Ahora la pregunta más importante ¿Cómo puedo utilizar el Active recall? Para poner en práctica el active recall, simplemente repasa el material de estudio; después, trata de recordarlo sin mirar los apuntes o el material que estés estudiando. Esto lo puedes hacer mediante tarjetas de memoria, pruebas prácticas, enseñando a otros o simplemente repitiendo la información en voz alta. y para que te quede más claro te dejo algunos ejemplos:
Ejemplos de cómo poner en práctica el Active Recall:
1.- Después de leer un capítulo de un libro, cierra el libro y trata de recordar los conceptos clave que acabas de leer. Escribe un pequeño resumen de todos los conceptos que aprendiste. Vuelve a leer el libro para ver cuánto aprendiste y repasa los conceptos que no has aprendido.
2.- Utiliza tarjetas de memoria con preguntas en un lado y respuestas en el otro, y practica para recuperar la información. Para esto también puedes ayudarte con aplicaciones como Anki o Notion.
3.- Haz pruebas prácticas regularmente para evaluar tu capacidad de recordar la información que has adquirido.
4.- Explica los conceptos a un amigo o familiar para practicar los temas que estudiaste (en los siguientes métodos te lo explicaré mejor).
5.- Escribe resúmenes en tus propias palabras después de estudiar un tema y luego repasa para recordar la información clave.
Space Repetition
La repetición espaciada también es un método que se ha vuelto muy popular en los últimos días, pero seguramente te estés preguntando ¿de qué trata esta técnica de estudio? Si bien esta técnica de estudio consiste en revisar el material estudiado en intervalos de tiempo cada vez mayores, basándose en el principio de que el cerebro recuerda mejor la información cuando se repasa en momentos específicos y espaciados en el tiempo, evitando así la curva del olvido, donde nos obligamos a repetir la información una y otra vez, pero en espacios prolongados de tiempo, donde nos tomamos un descanso de unas horas o un día para volver a revisar la información y que al paso del tiempo podamos retener más información.
La repetición espaciada es considerada como una técnica efectiva, donde no se necesita mucho esfuerzo por nuestra parte para aprovechar la curva de olvido del cerebro, donde se muestra que tendemos a olvidar la información con el tiempo si no la repasamos. Al revisar la información en momentos estratégicos, se refuerza la retención y se evita la curva del olvido.
¿Cómo usar la space repetition?
Para aplicar la Repetición Espaciada, es importante revisar la información de manera regular pero con intervalos de tiempo cada vez más largos. Puedes utilizar aplicaciones o herramientas especializadas que programen las repeticiones en momentos óptimos. Para mejorar la eficiencia del space repetition puedes usar los siguientes pasos.
1.- Organiza el material que deseas estudiar: Divide lo que necesitas estudiar en cantidades pequeñas para que puedan utilizarla de manera más fácil.
2:- Crea tarjetas de repaso: Donde, de un lado, escribas las preguntas o conceptos clave y, en el otro, las respuestas. Puedes usar aplicaciones como Anki o Quizlet para esto.
3.- Establece intervalos de repaso: dónde debes empezar repasando justo después de aprender algo nuevo. Luego, aumenta gradualmente el tiempo entre repasos: al día siguiente, luego a los tres días, una semana, dos semanas, y así sucesivamente. Debes de tener en cuenta que se puede optimizar esta técnica practicando en intervalos de tiempo similares, así que ponte un horario en específico para estudiar, agenda un horario a la misma hora para estudiar.
4.- Prioriza los temas: Dale mas importancia y concéntrate en los temas más difíciles que encuentres y repásalas con más frecuencia.
5.-Combina con la active recall: Debes Intentar recordar la información sin ver la respuesta.
Ejemplos de cómo utilizar el active recall:
Después de estudiar un tema nuevo, programa un repaso para 24 horas después, luego dos días después, luego cada tres y así sucesivamente.
Utiliza aplicaciones como Anki o Quizlet que implementen la Repetición Espaciada para crear tarjetas de memoria y programar repasos automáticos.
Divide tus sesiones de estudio en intervalos más cortos y repasa la información al final de cada sesión. Luego aumenta gradualmente los intervalos entre los repasos.
Utiliza técnicas de activación de la memoria, como hacer preguntas sobre el material de estudio y tratar de recordar las respuestas, en lugar de simplemente revisarlas.
Crea un plan de estudio que incluya repasos regulares de la información a lo largo del tiempo, y haz un seguimiento de tu progreso para ajustar los intervalos según sea necesario.
Método rápido
Este es uno de mis métodos de estudios favoritos, creado por el empresario Jim Kwik en su libro “sin límites”. Donde tenemos que enfocarnos en: olvidar, actuar, estado, enseñar, agendar y revisar, te dejo el link de compra del libro. Créeme, una vez que leas este libro, tu percepción sobre el estudio cambiará mucho. Es uno de los mejores libros que he leído. ¿Cómo utilizar el método rápido? OLVIDAR: El meto consiste en OLVIDAR, te propone a olvidar tres puntos fundamentales para que puedas potenciar tu aprendizaje, debes de olvidar todo lo relacionado al tema que estés estudiando, ya que nuestro ego nos puede hacer pensar que ya sabemos algo relacionado al tema y que inconscientemente nos limita para estudiar nueva información, debes de tener una mentalidad humilde y compórtate como un niño. Kwik, J.(2022)declara: ”Una de las razones por las que los niños aprenden rápidamente es porque son recipientes vacíos; ellos saben que no saben”(p.81), como el famoso filosofo Sócrates menciona “Solo sé que no sé nada”, haciendo ilusión de que no se puede saber algo con una gran certeza e incluso en los casos en los que crees saber lo suficiente. También nos hace olvidarnos de las distracciones y de esas cosas que no son urgentes pero que constante mente están divagando por nuestra cabeza lo que ocasiona que no estemos concentrados en la actividad que estemos realizando, si lo que te preocupa tiene una solución rápida, es decir si no tiene mucha complicación como avisarle a tu hermano que traiga la comida, bueno solo resuelve tu problema lo mas rápido posible y listo, pero si tu problema no lo puedes solucionar por tu cuenta, por ejemplo que tu maestra te allá pedido la tarea a una cierta hora pero por cuestiones externas o que se te halla olvidado se lo enviaste fuera de tiempo y ahora tienes ese pensamiento constante de preocupación de que si te lo aceptara o no, bueno será mejor que lo olvides eso ya no esta en tu poder, solo te queda aprender de tus errores para que no te pase lo mismo la próxima ves pero no te enfoques en los problemas que no puedes solucionar
ACTUAR: Una parte fundamental para mejorar nuestra retención de información al momento de estar estudiando es el actuar. Tener un aprendizaje activo te permitirá aprender más y ser más rápido, porque el aprendizaje es un proceso activo donde constantemente tienes que estar poniendo en práctica, resolviendo y practicando hasta entender el tema. Normalmente tenemos la idea de que el estudio es una actividad pasiva, gracias al sistema educativo que tuvimos de pequeños, donde solo te sientas a leer; subrayar e intentar memorizar todo lo que se te sea posible. Para tener una mejor retención del tema es importante que actúes, que tengas un aprendizaje siempre activo; pon en práctica todo lo que estés estudiando y verás grandes cambios.
ESTADO: El autor hace mucho hincapié en la importancia del estado de ánimo, tanto mental como físico, ya que es una parte fundamental a la hora de estudiar. Poniendo un ejemplo rápido: imagínate regresar a la escuela o si está cursando la escuela, imagínate tomar clases con esa maestra(o) que simplemente no se esfuerza en intentar que las clases sean interesantes. El estado en el que te encuentras va a hacer de aburrimiento y cuando intentes estudiar o regresar a aprender esto se te va a complicar, dado a que ya tienes registrada esa emoción con la materia. Es por eso que cuando sufrimos alguna experiencia y sentimos felicidad o tristeza, tendemos a asimilar la experiencia con una emoción y esa experiencia jamás se olvida, así que considera asimilar alguna de estas emociones para mejorar tu estado al momento de estudiar:
- Seguridad
- Alegría
- Expectación y asombro
- Sensación de triunfo
- Curiosidad
Y tienes que intentar dejar estas emociones para que al momento de que estés estudiando no tengas malas experiencias y tu retención no se vea afectada. Miedo y ansiedad.
- Tensión
- Irá y enfadó.
- Culpabilidad
- Aburrimiento
- Envidia y celos.
Entiendo que esto pueda ser algo complicado para ti, las personas normalmente solo aprenden con las primeras emociones cuando el tema es de su agrado, cuando tienen curiosidad o les gusta el tema es fácil poder estudiar con estas emociones pero, si al contrario estás intentando pasar una materia que simplemente no es de tu agrado, será muy difícil que estudies con estas emociones, pero no imposible, si esto te pasa intenta pensar en los veneficios que te va a traer si aprendes esa habilidad, estudia lo maravilloso que puede ser esa materia y cuál es su aplicación en el mundo real, tienes que intentar encariñarte con esa materia para que puedas mejorar tu concentración y retención.
ENSEÑAR: Cuando estés aprendiendo cualquier habilidad o tema, te recomiendo que puedas enseñárselo a otra persona, no importa a quién sea, tu mamá, papá, hermanos, sobrinos o a amigos. Esto potenciará muchísimo tu retención y tu comprensión del tema que intente enseñar, ya que estás constantemente obligándote a mejorar en el tema y lo abordarás con la intención de poder domarlo por completo. Esto te ayudará debido a que estarás estudiándolo dos veces, uno cuando te estés retroalimentado del tema y otro cuando se lo estés enseñando a otra persona, y así estarás aplicando un aprendizaje más activo.
AGENDAR: Una de las herramientas más importantes para la productividad es la agenda. Poder organizar tus eventos y actividades te quita un peso de enzima; no tienes que estar constantemente recordando qué tienes que hacer o qué actividad tenías que realizar; solo lo agregas a la agenda y listo; es más, es muy probable que si no lo tienes escrito lo que tienes que hacer, es muy probable que no lo termines haciendo, así que agrega un espacio en tu agenda (te recomiendo que te pongas la misma hora) para estudiar.
REVISAR: Poder revisar el material previamente estudiado antes de una sesión de estudio mejorará la retención de información. Ponlo en práctica antes de empezar a estudiar, tomate unos cinco minutos para poder recordar lo que previamente habías estudiado, y revísalo para ver si estabas en lo correcto. Haciendo esto, estás poniendo en práctica el principio de la space repetition, potenciando la memoria y su concentración.
Espero que después de lo que hayas leído entiendas por qué es uno de mis métodos favoritos para poner en práctica antes y después de una sesión de estudio, ya que es un método muy completo, donde ponemos en práctica varias técnicas ya habladas y futuras técnicas que veremos más adelante; te invito a que puedas adquirir este libro. Es un excelente libro para poder aprender a aprender y te agradecería que lo puedas comprar con el link que te dejo, para apoyar el proyecto Estudio Eficaz. Kwik, J. (2022). Sin límites: Utiliza el método rápido (pp. 80-85). Urano
SQ3R
El método de Survey, Question, Read, Recite y Review, o por su abreviación SQ3R, es una técnica de estudio que mejora la retención y comprensión de la información. Explorar, preguntar, leer, recitar y repasar, es el enfoque que nos permite desglosar el proceso de estudio en etapas un poco más digeribles, donde cada paso refuerza el aprendizaje anterior, facilitándonos una comprensión más profunda y duradera. Este método, como todos los anteriores, te obliga a tener un aprendizaje activo, interactuando con el contenido, y por ende mejora tu retención y el tiempo que necesitas para estudiar.
Este método fue desarrollado en el año de 1946 por el psicólogo educativo estadounidense Francis Pleasant Robinson, donde su objetivo fue darle a los estudiantes una técnica para mejorar las habilidades de estudio y la comprensión lectora.
¿Cómo utilizar el método SQ3R?
1.- Survey (Explorar): Analiza rápidamente el material para tener una visión general del tema. Observa los títulos, subtítulos, gráficos y resúmenes, intentando profundizar en el tema. Observa las palabras claves, conceptos e ideas más importantes. Esto ayuda a entender el contexto y prepara la mente para los detalles del tema.
2.- Cuestión (Preguntar): Después de haber analizado el tema, poder realizar preguntas de los títulos, subtítulos o de algo que te parezca importante, transformará tu lectura pasiva en una tarea más activa. Estimulando el pensamiento crítico, dirigirá la atención hacia los aspectos más importantes del material, permitiéndote enfocar tu lectura en encontrar respuestas específicas. Además de que las preguntas generan curiosidad y motivación, permitiéndonos que nuestro estudio sea más interesante y dinámico.
3.- Read (Leer): Lee el material en detalle, buscando las respuestas a las preguntas que formulaste. Esto convierte a la lectura en una actividad más consciente, activa y te involucrarás más en ella, teniendo como objetivo responder tus preguntas. Esto promueve una mejor retención del material, estimulando tu concentración y la comprensión del tema.
4.- Recite (Recitar): Utilizando el principio de la recuperación activa, intenta, sin mirar el texto, recordar y verbalizar la información principal. Esto te permitirá reforzar la memoria, ayudándote a identificar lo que necesitas repasar. Al intentar verbalizar o escribir lo aprendido con tus propias palabras, se refuerzan los conocimientos y se identifican posibles vacíos de comprensión. Este paso es muy importante porque te permite transferir la información de la memoria a corto plazo a la memoria a largo plazo, lo que facilita su recuperación futura.
5.- Review (Repasar): Realiza un repaso y vuelve a revisar el material para consolidar el conocimiento y asegurarte de que has comprendido todo correctamente. Esto te permitirá fortalecer la memoria a largo plazo mediante la repetición espaciada, ayudándote a autocorregir tus errores y asegurar la comprensión completa del material. Al revisar regularmente, te aseguras de que la información se mantenga fresca y accesible, mejorando significativamente tu retención y la capacidad para aplicarla cuando sea necesario.
Ejemplos de cómo puedo poner en práctica el método SQ3R:
- Antes de leer la información, un capítulo de un libro o un artículo científico, examina los títulos y subtítulos del texto para tener una idea general del contenido que estás por estudiar.
- Después, intenta convertir los títulos de los apartados en preguntas. Por ejemplo, si el título de tu tema es “Calculo diferencial”, entonces tienes que hacerte la pregunta “¿Qué es el cálculo y cómo funciona?” entre otras preguntas más. Esto dependerá de los títulos y subtítulos que tengas en tu texto.
- Después, lee el capítulo buscando específicamente las respuestas a las preguntas que realizaste. Esto te mantendrá enfocado y activo, lo que provoca que la lectura sea más activa y por ende mejora tu retención de la información.
- Después de leer tu información, trata de recitar la información en voz alta o escribe un resumen de lo que recuerdas sin mirar el contenido que hayas estudiado.
- Dedica algunos minutos a revisar tus apuntes y las preguntas que anteriormente formulaste, asegurándote de que puedes responderlas sin ayuda del material.
Método del caso
El método del caso es un método de estudio que fue creado por la escuela de derecho de la Universidad de Harvard, en donde los estudiantes aprenden por medio de situaciones reales. Estos tienen que conocer y analizar la situación, provocando en los alumnos un estudio activo y desarrollando sus habilidades de pensamiento crítico y la toma de decisiones.
Al tener que analizar casos reales, los estudiantes tienen que evaluar diversas perspectivas y formar juicios basándose en datos precisos, donde pueden discutir esto en grupo, lo que les permite desarrollar habilidades de cooperación y comunicación, fomentando el trabajo en equipo. También ayuda a preparar a los estudiantes para enfrentar y resolver los problemas del mundo real, promoviendo un aprendizaje significativo y práctico, promoviendo a los estudiantes a tomar decisiones bajo presión. ¿Cómo utilizar el método del caso? 1.- Selecciona un caso: Este tiene que ser un problema real y relevante que te pueda permitir un análisis más profundo. Apóyate de libros, artículos científicos y recursos en Internet que te permitan analizar un caso del tema de tu interés. Asegúrate de que el caso que elegiste sea relevante y lo suficientemente complejo como para desafiar tus habilidades y pensamiento crítico.
¿Cómo utilizar el método del caso?
2.- Recopilación de datos e investigación: Intenta reunir la información más contextual y específica de tu caso. Lee el caso con mucho detalle y trata de tomar notas sobre los aspectos más relevantes e interesantes y trata de formularte preguntas de cualquier situación que te pueda llamar la atención.
3.- Análisis del caso: Después de recopilar tu información, identifica el caso principal y analiza las variables claves; evalúa las circunstancias y considera las diversas perspectivas.
4.- Discute tu solución: Después de haber analizado el tema, elige la mejor solución basándote en tu análisis, justifica tu decisión con argumento sólido y, si tienes la oportunidad de poder compartir tu solución con otras personas, hazlo. Poder estudiar con otras personas mejorará tu retención y tus decisiones, ya que tendrás otro punto de vista que podría mejorar la solución.
5.- Reflexión y conclusión: Una vez elegido tu solución, analiza el proceso y los resultados de tu análisis y tomate un tiempo para poder reflexionar sobre los aprendizajes obtenidos y hazte las preguntas: ¿Qué aprendiste? ¿Cómo podrías aplicar este aprendizaje en situaciones futuras? Y para concluir, puedes realizar un informe detallado sobre tu análisis y conclusiones para reforzar tu retención.
Ejemplos de cómo utilizar el método del caso:
Negocios: Analiza un caso de estudio de una empresa (esta puede ser de tu trabajo o alguna otra empresa que hayas encontrado) que enfrenta algunos problemas. Investiga su situación y formula preguntas sobre las causas y sus posibles soluciones. Después, desarrolla una estrategia de recuperación y, si puedes, compártela en un foro o un blog con otras personas interesadas en el tema para encontrar la mejor solución.
Medicina: Puedes utilizar un caso clínico complejo y analizar los síntomas, el diagnóstico y los posibles tratamientos que se le puedan dar. Evalúa las opciones de tratamiento y selecciona la mejor basada en la evidencia disponible y recuerda consultarlo primero con un experto como un profesor o un médico experimentado.
Derecho: Examina un caso legal histórico e identifica los problemas legales y éticos, desarrolla argumentos para ambas partes antes de llegar a una solución y puedes reflexionar con algún compañero, profesor o de igual manera en un foro con personas con el mismo interés.
Educación: Si te gustaría poder enseñar, puedes analizar un caso de estudio de una escuela con bajo rendimiento académico o cualquiera de tu interés. Investiga las causas, evalúa diferentes estrategias de mejora y propone un plan de acción con otras personas.
Ingeniería: En caso de que estudies alguna ingeniería, de igual forma busca un caso que sea técnico y de igual forma sea complejo para que desafíes tus conocimientos y habilidades. Identifica los desafíos, evalúa posibles soluciones y propone mejoras para la ejecución del proyecto.
Para utilizar el método del caso, necesitas adaptarlo a tus necesidades y circunstancias. Recuerda que no necesitas estar en un ambiente educativo formal o trabar en una empresa para beneficiarte de este método. Si te das cuenta, no importa qué materia o área estés estudiando, el procedimiento siempre es el mismo.
Método de Feynman
Todo se resume en la capacidad de enseñar de la forma más simplificada que puedas. Para explicarle esto a un niño de 5 años y que te entienda, esto sería en pocas palabras el método de Feynmann. Un método donde se ponen a prueba tus conocimientos en la materia que estés estudiando y te obligan a simplificar el tema de la forma más clara para poder enseñar a cualquier persona sin conocimientos previos en la materia. Basándose en la idea de que para dominar realmente un concepto, debes ser capaz de explicarlo de manera simple y clara.
Como lo dice su nombre, este método fue creado por el físico experimental Richard Feynman, conocido por sus varias contribuciones a la ciencia y también al modo de aprendizaje con este método. Utilizó este método para preparar sus conferencias y clases en el Instituto de Tecnología de California (Caltech), y su enfoque ha sido adoptado por estudiantes y profesionales de diversas disciplinas alrededor de todo el mundo.
Siendo un método efectivo al enfocarse en la comprensión profunda en lugar de la memorización superficial. Donde se promueve la retención a largo plazo y la habilidad de aplicar el conocimiento de manera práctica. Al simplificar conceptos complejos, te obliga a enfrentarte a las lagunas en tu conocimiento y a abordarlas directamente, lo cual fortalece tu aprendizaje y tu capacidad para comunicar ideas complejas de manera efectiva.
¿Cómo utilizar el método de Feynman?
La técnica de Feynman se puede desglosar en cuatro pasos fundamentales:
- Seleccione una temática: Elige el tema que quieras aprender.
- Describa el tema de manera simple: Escribe o explica el concepto como si estuvieras enseñándolo a alguien que no tiene conocimientos previos. Intenta usar un lenguaje simple y ejemplos comunes.
- Identifica lagunas en tu experiencia: mientras explicas, te darás cuenta de las partes que no entiendes por completo. Observa estas brechas.
- Revise y simplifique: Investiga y aprende sobre las partes que no entendiste bien, luego repite el proceso de explicación. Aclara y simplifique cada vez más hasta que puedas explicarlo fácilmente.
Ejemplos de cómo utilizar el método de Feynman
Matemáticas – Selecciona el tema por ejemplo: el teorema fundamental del cálculo.
- Explica en términos simples: Describe cómo relaciona la derivada y la integral de una función.
- Identifica lagunas: nota si no puedes explicar la conexión entre antiderivadas y áreas bajo la curva.
- Revisa y simplifica: Estudia ejemplos y vuelve a explicar hasta que la relación sea clara.
Biología – La fotosíntesis: Selecciona el tema: El proceso de la fotosíntesis.
- Explica en términos simples: Describe cómo las plantas convierten la luz solar en energía.
- Identifica lagunas: Detecta si no puedes explicar la reacción química involucrada.
- Revisa y simplifica: aprende sobre las reacciones de luz y oscuridad y vuelve a explicar.
Historia – La Revolución Francesa Selecciona el tema: Causas de la Revolución Francesa.
- Explica en términos simples: Cuenta cómo la desigualdad económica y política llevó a la revolución.
- Identifica lagunas: si no puedes explicar ciertos eventos clave, como la toma de la Bastilla.
- Revisa y simplifica: Lee más sobre esos eventos y repite la explicación.
Mapas mentales
Los mapas mentales también son un excelente método de estudio donde nos permite organizar información de manera gráfica, facilitando la conexión al utilizar colores, imágenes y palabras clave donde se estimula nuestro cerebro, haciendo que la información sea más accesible y memorable”. En pocas palabras, funcionando como un concepto central en el medio y ramificaciones que representan ideas relacionadas.
¿Cómo utilizar un mapa mental?
Para crear un mapa mental, comienza con tu tema central que estés estudiando en el centro de tu hoja. Partiendo de ahí, dibuja ramas que se extienden hacia fuera, cada una representando una idea principal. No te olvides de añadir sub-ramas para detalles y utilizar colores, imágenes y palabras clave para hacer la información más dinámica.
Ejemplos de cómo utilizar los mapas mentales
Resumen de un libro: El texto comienza con el título del capítulo en la parte superior. Por lo tanto, cree ramas para cada sección principal del texto. Trata de incluir detalles cruciales en subramas. Usa varios colores para destacar ideas clave.
Planificación de proyectos: Piense en la situación en la que está organizando un proyecto. Coloque el nombre del proyecto en la parte superior de la hoja. Crea ramas para cada tarea o fase del proyecto. Incluye sub ramas con fechas límite, responsabilidades y recursos requeridos.
Preparación para exámenes: Haz un mapa mental de los materiales que necesitas estudiar antes de un examen. Coloque el tema principal en el centro y despliegue subtemas, definiciones y fórmulas. Para facilitar la memorización, utilice imágenes y palabras clave.
Resolución de problemas: Si necesitas resolver un problema, empieza con el problema principal. De ahí en adelante, arrastra posibles soluciones y consecuencias. Agregue más detalles y considere cada opción.
Aprendizaje activo
Esta técnica de aprendizaje consiste en interactuar directamente con el material, permitiéndonos un aprendizaje más dinámico, y como lo hemos visto anteriormente: la clave de un buen estudio es un estudio activo. Esto es lo que propone este método de estudio, donde tememos que interactuar de distintas formas con el material, como discutiendo y aplicando la información, en vez de solo recibir la información e intentar memorizándola. Transformando la manera en que nos relacionamos con el material. En lugar de solo memorizar pasivamente, al involucrarnos activamente, nuestro cerebro crea conexiones más fuertes, lo que hace que la información sea más fácil de recordar y aplicar. Por dar un ejemplo, es como aprender a montar en bicicleta: no basta con solo leer el manual, tienes que subirte a la bicicleta y pedalear, tratando de mantener el equilibrio.
¿Cómo utilizar el aprendizaje activo?
Implementar el aprendizaje activo es más sencillo de lo que parece, incluso si estudias por tu cuenta. Si bien transformar las clases tradicionales en experiencias interactivas con discusiones en grupo, debates, estudios de casos y juegos de rol es ideal, hay maneras efectivas de incorporar esta técnica cuando estás solo.
Puedes convertir tus estudios en proyectos prácticos. Con el ejemplo anterior, si estás aprendiendo programación, en lugar de solo leer sobre cómo escribir código, crea y desarrolla tus propios proyectos. Por ejemplo, desafíate a ti mismo a desarrollar una pequeña aplicación o un sitio web. Este enfoque te obliga a investigar, aplicar y solucionar problemas por tu cuenta, convirtiendo la teoría en práctica. Es como construir tu propio rompecabezas, donde cada pieza que encajas es un nuevo conocimiento que has adquirido y comprendido plenamente.
Ejemplos de cómo utilizar el aprendizaje activo
Simulaciones: Utilizar simulaciones para recrear situaciones reales en un entorno controlado es una buena forma de poner en práctica el aprendizaje activo. Por ejemplo: si estudias economía, puedes crear un simulador de un mercado bursátil donde los accionistas compran y venden acciones. Permitiendo que experimentes las dinámicas del mercado de manera más directa.
Aprendizaje basado en problemas: planteaste problemas complejos y encuentras las soluciones. Por ejemplo: si estudias ingeniería, podrías presentar un problema de diseño. Ahora trabaja para desarrollar una solución práctica.
Diarios de reflexión: Llevar un registro o en este caso un diario de reflexión te ayuda a procesar y fortalecer la información, además de identificar áreas donde necesitan más práctica.
Mapas conceptuales: Crear mapas conceptuales que conecten diferentes conceptos aprendidos del tema que estés viendo te ayudará a no solo organizar la información de manera visual, sino que también te ayuda a entender cómo las ideas están interrelacionadas.
Experimentos prácticos: Poder realizar experimentos prácticos te da la oportunidad de ver la teoría en acción y entender mejor los conceptos a través de la práctica directa, como si fueran científicos en un laboratorio.
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